breve historia de las ciencias cognitivas
Alejandra Ciria y Bruno Lara
2021
CIENCIAS COGNITIVAS CORPORIZADAS
“We are in a world that seems to be there before reflection begins, but that world is not separate from us” [estamos en un mundo que parece estar ahí antes de que se comience a reflexionar sobre él, pero ese mundo no está separado de nosotros] (Varela et al., 1991, p. 3)
El interés central de las Ciencias Cognitivas Corporizadas (CCC) es el estudio de la cognición considerando el cuerpo de los agentes, el entorno, así como su compleja interacción entre los agentes y su nicho ecológico (Clark, 1999). Al considerar el rol central que tiene el cuerpo en la cognición, las CCC involucran programas de investigación que se distancian de las Ciencias Cognitivas tradicionales (Goldman, 2012). Para ver un video en donde se resumen estas ideas entra aquí.
Las teorías dentro de las CCC pertenecientes a la denominadas 4EA (corporizada/corporeizada - encarnada, embebida, extendida, enactiva y afectiva) históricamente han tenido diferentes enfoques y desacuerdos. Aunque los desacuerdos son, principalmente, acerca de los elementos que componen o son necesarios para la cognición, todas ellas se pueden concebir como coherentemente opuestas al internalismo y a las visiones cerebro-centristas de la cognición (Newen et al., 2018). En este sentido, hay un fuerte debate sobre la manera en que se entienden a las representaciones mentales o si éstas deben ser rechazadas por completo de las explicaciones corporizadas de la cognición. Aún se requiere de mucha investigación para comprender qué realmente significa que la cognición es 'corporizada' y hasta qué punto lo es (Goldman, 2012).
CIENCIAS COGNITIVAS CORPORIZADAS RADICALES
Clark (1997) propuso el término de 'Ciencias Cognitivas Corporizadas Radicales' para hacer un contraste con las teorías dentro de las Ciencias Cognitivas Corporizadas que conservan supuestos centrales del cognitivismo, como es el caso de las representaciones mentales tradicionales. Sin embargo, Chemero (2013) hace una crítica a la propuesta de Clark sobre su visión de las Ciencias Cognitivas Corporizadas Radicales, argumentando que no pueden llamarse radicales al conservar nociones como 'representaciones orientadas a la acción'. Aunque las 'representaciones orientadas a la acción' dan énfasis al rol del cuerpo y el entorno para guiar a la conducta, aún conservan los principios de la visión computacionalista de la mente. Dentro de esta visión de la cognición corporizada (corporeizada) es común que se señalen a la teorías que continúan dándole un lugar a las simulaciones mentales, tales como la cognición extendida (Clark y Chalmers, 1998) y la cognición cimentada y situada (Barsalou, 2003).
Las Ciencias Cognitivas Corporizadas Radicales, cuyos principales representantes son el enactivismo y la psicología ecológica, rompen con la idea de que la cognición se basa en la manipulación de estados mentales (Segundo-Ortin, 2020). Para Chemero (2013), las "genuinas" Ciencias Cognitivas Corporizadas Radicales requieren concebir a los agentes como sistemas dinámicos, esto es, no se les puede descomponer en partes debido a que los agentes y el entorno forman un sólo sistema que se auto-organiza. En contraste con una visión representacionalista, la postura radical de la cognición corporizada (corporeizada) es eliminacionista, en el sentido de que elimina el concepto de representación, así como todos los procesos involucrados en la adquisición de una copia del mundo para después representarlo (Chemero, 2011). Por lo tanto, se sugiere que la teoría de los sistemas dinámicos es especialmente apropiada para la investigación dentro de las Ciencias Cognitivas Corporizadas Radicales (por ejemplo, los modelos dinámicos de la cognición propuestos por Haken, Kelso, y Bunz, en 1985, así como el de Kugler, Kelso, y Turvey en 1980).
Considerando lo anterior, es posible categorizar a las distintas teorías de la cognición corporizada (corporeizada) dentro de las 'Ciencias Cognitivas Corporizadas' o dentro de las 'Ciencias Cognitivas Radicales' (Chemero, 2011). En las Ciencias Cognitivas Corporizadas se considera el rol del cuerpo en la cognición, se toma en cuenta el valor de la teoría de los sistemas dinámicos y, en contraste con las Ciencias Cognitivas Corporizadas Radicales, se combinan estas ideas junto con los principios de la teoría computacional de la mente.
Las teorías dentro de las Ciencias Cognitivas Corporizadas defienden el rol explicativo de las representaciones debido a que permiten explicar la capacidad de razonar de los agentes en ausencia de aquello que se razona, lo que implica que los agentes pueden planear y tomar decisiones para un futuro desacoplados del entorno inmediato (Clark, 1999). Este argumento se conoce como cognición fuera de línea y se relaciona con problema del 'hambre-representacional' (Clark y Toribio, 1995).
El intento de radicalizar a la cognición corporizada (corporeizada), alejándose por completo del concepto de representación, ha generado otros problemas que suelen pasarse por alto. Por ejemplo, en ocasiones se descuida hacer una clara distinción entre cognición, percepción y conducta, incluso, estos conceptos dentro de distintas teorías de la cognición corporizada (corporeizada) llegan a ser utilizados como sinónimos (Aiazawa, 2015; 2019). Si se pierde la distinción entre estos conceptos el objeto de estudio de las Ciencias Cognitivas Corporizadas corre el riesgo de desvanecerse.
CONCLUSIÓN
El alcance de los enfoques corporizados dentro de las Ciencias Cognitivas Corporizadas aún no es claro y todavía hay varias dificultades que tienen que ser resueltas. A lo mejor, es importante que se converja en un enfoque que considere las representaciones corporizadas como un elemento importante para la cognición (Goldman, 2012). Actualmente, han surgido nuevas perspectivas sobre la cognición corporizada (corporeizada), las cuales parecen tener el potencial para unificar las posturas tradicionalmente vistas como rivales (Williams, 2018) mediante una nueva manera corporizada (corporeizada) de concebir a las representaciones (ej. Clark, 2013; Hohwy, 2013).
REFERENCIAS
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